La carrera deportiva de Jesse Owens:
La carrera deportiva de este descomunal atleta, tuvo como máximo apogeo su participación en los Juegos Olímpicos de Berlin 1936, donde a priori, todo parecía indicar que iban a ser un escaparate donde Adolf Hitler expondría al mundo la superioridad de "su raza aria".Pero por desgracia para él, iban a tener un protagonista con el que seguro, Hitler, no había contado.
Jesse Owens contaba con 23 años cuando compitió en los JJOO, estaba en la plenitud de sus cualidades físicas. Y se presentó en Berlin donde fue la mayor estrella. Logró ganar 4 medallas de oro.
- 100 m.
- 200 m.
- Salto de longitud
- 4x100
Fue todo un pionero en cuanto a los deportistas de color.
También fue el primer afroamericano en conseguir un patrocinador, con unas zapatillas de la empresa Gebrüder Dassler Schuhfabrik Empresa de Adi Dassler, quien más tarde fundaría Adidas.
La relacion entre Owens y Hitler:
Esta relación ha tenido más de una versión a lo largo de la historia, pero entendiendo el contexto en el que se produjo este hecho, es de suponer, que las cosas no son del todo cierto, ni del todo falso. Tal vez haya que exponer todas las versiones e ir desgranando poco a poco como ,siempre desde el lado de la opinión y la suposición, como debieron de ocurrir los hechosUn hecho que si que parece irrefutable, es el de que los primeros días de los Juegos, Hitler solo saludaba a los atletas alemanes que habían ganado medallas, tras lo cual abandonaba el estadio. Aunque quizás convencido por los oficiales de los Juegos Olímpicos, que le instaron a saludar a todos o a ninguno, el fuhrer cambio sus saludos iniciales, al parecer para adoptar la segunda opción.
Algunos historiadores afirman que Hitler, pudo haber evitado acudir a los juegos por amenaza de lluvia. Lo que provocó el retraso de estos. Y que esta decisión se tomara incluso antes de la participación de Owen. Aunque ninguna de estas versiones parece evitar el hecho de que el mandatario sintiera bastante repulsión hacía el afroamericano. Cosa que por otro lado parece bastante probable.
Aunque hay algunas palabras del propio Owens que hablan acerca de los hechos que parecen avalar que Hitler evadia reconocer sus logros y rechazarle cualquier saludo:
Otra de las versiones, en este caso de las más radicales, es la de Albert Speer, que dice lo siguiente:
Hitler tenía controlado su tiempo tanto para llegar al estadio como para marcharse. Sucedió que debía marcharse antes de la ceremonia de entrega de medallas de los 100 m. Pero antes de que se fuera yo me dirigí a aparecer en una transmisión televisiva y pasé cerca de donde él estaba. Él me saludó y yo le correspondí. Creo que es de mal gusto criticarle si no estás enterado de lo que realmente pasó
En el lado opuesto, el periodista alemán Siegfried Mischner afirma que Owens siempre llevaba una foto en la cartera en la que se veía a Hitler estrechando al mano de Owens.
Hitler estaba «muy molesto por los triunfos del negro estadounidense. [Porque] cualquiera que tuviese ancestros procedentes de la jungla era un salvaje; su constitución física era mucho más fuerte que la de los blancos y por ello deberían haber sido excluidos de los juegos»
Esto lo dijo debido a que el propio Owens, años más tarde, que pensaba que los periódicos habían tratado su relación con el fuhrer de forma injusta, cambiaran sus versiones por una aunque menos mediática, mucho más justa y real. Y fue entonces cuando Jesse Owens le enseño la foto a Mischner.
Aunque esto nunca se ha podido demostrar.
En 2014, Eric Brown, que fue un distinguido piloto britanico, afirmo que había visto como Hitler estrechó la mano de Owens, por lo que las afirmaciones de Mischner no parecen tan descabelladas.
Por lo que podemos deducir que probablemente nada es como lo pintan, ni como nos han hecho creer, al menos en lo referente a Jesse Owens.
De vuelta a casa:
La vuelta a casa de Owens, no fue lo que él hubiese deseado, hay que tener en cuenta que en Alemania, Jesse gozaba de todos los privilegios de un atleta, podía viajar libremente, alojarse en cualquier hotel, y de vuelta en Estados Unidos, no todo iba a ser tan idílico.Para empezar, debía alojarse en hoteles segregados, como los demás afroamericanos. Cabe destacar que EEUU vivía un periodo de segregación racial. Como dato "anecdótico" Owens, tuvo que utilizar el montacargas de un hotel para poder asistir a una celebración en su honor.
Una de las cargas más duras que sufrió en su vida el Gran Jesse Owens, fue que nunca fue invitado a la casa blanca a ser felicitado por sus hazañas, como otros medallistas olímpicos.
Owens ingresó en el Partido Republicano, etapa que utilizó para hablar sobre su aventura olímpica. Algunas de sus frases fueron las siguientes:
«Algunos dicen que Hitler me despreció. Pero yo les digo que no lo hizo. No estoy diciendo nada en contra de nuestro presidente. Recuerden, no soy un político, pero también recuerden que el presidente no me envió ningún mensaje de felicitación porque, según dicen, estaba muy ocupado»
En otro de sus discursos, señalo que Hitler no le había ignorado, «fue nuestro presidente el que lo hizo. El presidente no me envió ni siquiera un telegrama»
Conclusiones:
Todo parece indicar que no es del todo correcto lo que se dice de la relación entre Hitler y Jesse Owens, al menos, queda lugar para la duda, lo único que cabe destacar de esta historia, es que una figura tan extraordinaria dentro del deporte como fue este increíble atleta, se ha utilizado más con fines políticos que para ensalzar la grandeza del deporte.Por lo tanto me gustaría engrandecer la figura de JESSE OWENS como uno de los mejores atletas de la historia, que logró metas increíbles, mucho más que como la relación personal de Hitler con las personas de color o la época segregativa de EEUU.
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